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Encuentro III / México 1988









Tercer Encuentro Latinoamericano y Caribeño de CEBs Fecha: 09 - 12 Octubre de 1988 Lugar: Río Blanco, Ver, México Tema: Fe y compromiso político de las CEB Lema: “CEBs, pueblo de Dios que escucha y clama Objetivo general: Compartir, celebrar y clarificar el aporte de las CEBs a la evangelización liberadora de América Latina. Participantes: 220 Participantes de 21 países: Chile, Argentina, Paraguay, Uruguay, Brasil, Colombia, Perú, Bolivia, Ecuador, Puerto Rico, República Dominicana, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, El Salvador, Guatemala, México. Invitados: Estados Unidos (Pastoral Hispana), España, Sudáfrica y Suiza. 8 obispos (2 Bolivia, 2 Ecuador y 8 México)


Mensaje Encuentro III


III ENCUENTRO LATINOAMERICANO DE CEBs

09 - 12 de Octubre de 1988, Río Blanco, Veracruz, México

“CEBs, pueblo de Dios que escucha y clama”


A nuestros hermanos de las CEBs de cada uno a los que venimos representando, a nuestros hermanos cristianos que comparten con nosotros el seguimiento de Jesús liberador y a todos aquellos que, aún sin compartir nuestra fe, luchan por un mundo de justicia y paz, les enviamos nuestro saludo fraterno desde este encuentro en el que hemos compartido, celebrado y clarificado el aporte de las CEBs a la evangelización liberadora de América Latina. Pensamos que la mejor manera de compartir con ustedes la experiencia de estos días es hacerla oración, proclamando nuestra fe común. Señor Jesús, hoy, desde esta vida nueva de Iglesia que brotó del Vaticano II, a 20 años de Medellín, iluminados por Puebla y en el contexto de la Celebración de los 500 años de la primera Evangelización en nuestro continente, constatamos que tu Espíritu sigue vivo y que actúa en nuestro caminar como pueblo y como iglesia. Nos hemos reunido de diferentes partes, trayendo con nosotros el dolor, el amor, la esperanza y los esfuerzos de liberación de nuestros pueblos, junto con ellos afirmamos:

  • Creemos que el amor a Dios se concreta en la solidaridad con el pueblo, con el pobre, que esta solidaridad es experiencia de resurrección, como resistencia a la muerte y afirmación y compromiso eficaz con la vida.

  • Creemos en la comunidad fraterna que brota del seguimiento de Jesús, donde la gratuidad se expresa en la oración, la celebración y la Eucaristía, como impulso vitalizador para realizar el proyecto del Padre.

  • Creemos que por la organización del pueblo y el esfuerzo para transformar las estructuras injustas, podremos ir logrando un proyecto alternativo popular, en donde los bienes sean compartidos por todos.

  • Creemos que en medio del proyecto de muerte van surgiendo signos de vida, en el pueblo que se va convirtiendo en sujeto y en especial, en el reconocimiento y valoración de la mujer y del indígena.

  • Creemos en una Iglesia profética que, conocedora del proyecto de Dios e inserta en la realidad de los hombres, descubre y denuncia lo que se opone a este proyecto, anuncia los signos de vida que existen ya, consuela al pueblo que sufre y lo anima con la esperanza cierta de que la liberación plena es posible.

  • Creemos en los mártires y en los nuevos santos que por asumir este profetismo dieron su vida y por eso son ahora semilla de vida nueva para nuestros pueblos.

  • Creemos que Dios habla cuando en comunidad se comparte, se discierne y se pone sobre la Palabra de Dios leída desde la vida; esta Palabra que es luz en nuestro caminar.

  • Creemos en la comunidad servidora y ministerial, donde cada uno tiene funciones distintas, necesarias todas para nuestro crecimiento como pueblo y como Iglesia.

  • Creemos que en la religiosidad de nuestros pueblos se refleja la sorprendente riqueza y espontaneidad de Dios.

Por todo esto,

  • Con María, primera evangelizadora de nuestro Continente Latinoamericano

  • Con María, mujer sencilla, mujer del pueblo

  • Con María, mujer del SI y del Magnificat

  • Con María, la primera seguidora de Jesús.

Las Comunidades Eclesiales de Base queremos seguir siendo un aporte a la evangelización liberadora, explicitando al Dios del reino y colaborando en la construcción del Reino de Dios entre los hombres.

Río Blanco, Veracruz, México 12 de Octubre de 1988

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